El ministro de Economía de la Nación, Sergio Massa, confirmó que las exportaciones incrementales de autos y autopartes no pagarán retenciones en 2023, tal como había anunciado a fines de noviembre pasado.

 “Queremos anunciar que todo el incremental de exportaciones, todo lo que aumentemos este año en exportaciones en materia automotriz, no va pagar derechos de exportación. Queremos premiar la producción de trabajo argentino al mundo, la inversión, el talento, el capital humano, el esfuerzo de nuestros trabajadores vendido al mundo.”, sostuvo el funcionario en conferencia de prensa.

Esta medida, de acuerdo a lo expuesto por Massa, se traduce en la eliminación del pago de retenciones para 63.000 vehículos. “El 60% de los autos que se fabrican en el país se exportan y en el año 2022 se enviaron al exterior 322.286 autos, un 24,3% más que en 2021 o 63.000 unidades más”, indicó el funcionario. Es justamente sobre ese incremento el que será premiado por el Estado.

El anuncio se corresponde con una ampliación del sistema que ya estaba vigente en 2021. El año pasado, tanto terminales automotrices como autopartistas pagaron derechos de exportación hasta el monto facturado en 2021 (4,5% o 3%, según corresponda) y, una vez superado ese nivel, no tributaron para las nuevas exportaciones que generaron. La continuidad del programa estaba en duda para este año, pero el anuncio ratificó su vigencia para 2023.

 “Es el compromiso que asumimos desde que definimos un programa de trabajo y desde que acordamos un programa de importaciones. Los dólares de Argentina van para la producción y el trabajo, y para generar mayor nivel de exportaciones”, continuó el ministro.

Planes de expansión

Massa aseguró que el escenario a futuro permite avizorar para 2023 un horizonte de producción mínima de 610.000 vehículos, lo que implicaría un crecimiento del 13,6% y más de 73.000 nuevos en relación a todo lo producido en 2022. El año cerró con 536.893 autos fabricados en el país, según la Asociación de Fábricas de Automotores (Adefa).

 “Es fundamental que nosotros como Estado, más allá de las inversiones, hagamos nuestro aporte.“Es nuestra responsabilidad, a partir del trabajo con las terminales, encontrar mecanismos de fomento al crédito para que más argentinos puedan comprar vehículos producidos y fabricados en Argentina”, remarcó el funcionario.

También Martín Galdeano, presidente de Ford y de Adefa, remarcó esta semana que el primer objetivo de cara al futuro próximo es que el nivel de producción de 2022 se convierta en el nuevo piso. “La expectativa industrial y comercial viene acompañada por los planes de inversión que se anunciaron en los últimos 24 meses, que superan los USD 1.400 millones”, explicó.

“Estas inversiones están destinadas a aumentar la producción y a nuevos modelos globales. Nos permitirán potenciar las exportaciones, empleo y desarrollo de proveedores además de incluir mejoras tecnológicas en las plantas”, detalló Galdeano.

Por otro lado, Massa celebró que ya se están fabricando vehículos con un 50% de componentes completamente fabricados en el país y aseguró que el objetivo, tanto del Gobierno como de la industria, es que esa condición se traslade a toda la producción automotriz argentina.

El impacto del sector

Justificando la decisión de eliminar las retenciones para las exportaciones incrementales de autos, Massa mencionó algunos datos que demuestran el peso que la industria automotriz tiene sobre la economía nacional, más allá de su participación concreta sobre el sector exportador.

“Es muy importante lo que representa el complejo automotriz en términos de generación de empleo. Cuando tomamos desde las terminales hasta la última concesionaria, vemos que hay más de 600 mil trabajadores involucrados. Son 600 mil familias que participan en todo el proceso de producción, comercialización y exportación alrededor del sector automotriz”, apuntó.

“En la comparación con 2021, vemos que hay casi 50 mil empleos más en ese sector y vamos a seguir exportando”, completó el ministro.